“Tengo la conciencia tranquila por Colosio”: Rodolfo Mayoral
Alejandro Matty Ortega/Irreverente Noticias/Especial
Hermosillo, Sonora (IN).- Cansado de cargar con “la marca” de implicado en el asesinato del extinto candidato presidencial y sonorense, Luis Donaldo Colosio Murrieta, ocurrido el 23 de marzo de 1994 en Lomas Taurinas, Tijuana, Rodolfo Mayoral Esquer rompe el largo silencio y afirma que después de un año y medio preso el juez lo absolvió como a su señor padre, don Vicente Mayoral Valenzuela.
Con el apoyo del periodista Rodolfo Santos Esquer, en entrevista telefónica concedida en exclusiva al reportero de este medio binacional IRREVERENTE NOTICIAS, revela que la sombra del homicidio de Colosio Murrieta lo ha perseguido por el juicio social y la ambición de compañías extranjeras cinematográficas que se enriquecen con su nombre e imagen, como uno de los supuestos responsables de ese crimen que enlutó al país.
Mayoral Esquer, uno de los 4 detenidos junto al llamado “asesino solitario”, Mario Aburto, pasó 18 meses su proceso dentro del penal de “Almoloya de Juárez” hasta que el juez de la causa determinó su no participación en los hechos registrados la fatídica tarde del 23 de marzo de 1994, durante un mitin en la populosa Lomas Taurinas, barrio que hoy reviste un embovedado que sepultó una tragedia que aún retumba la conciencia del sistema político mexicano y acelera los corazones de millones de mexicanos, que vieron en Colosio Murrieta el fin a los privilegios y corrupción en México.
El 11 de enero 2012 muere su señor padre, Vicente Mayoral Valenzuela; quien junto a Tranquilino Sánchez y Rodolfo Riva Palacio, Mayoral Esquer, fueron detenidos luego de que el fiscal Miguel Montes García y posteriormente, Pablo Chapa Bezanilla determinaron su participación por ayudar o distraer la seguridad de Colosio.
Sorteando su vida entre el señalamiento, la crítica y “la marca”, sobrevive de la herrería y trabajos en el campo, “un todólogo que sobrevive para poder comer, como millones de mexicanos que salen a buscar el pan de cada día, con la conciencia tranquila de no ser mala persona y menos un asesino”.
IN/- Gracias por la entrevista Rodolfo, ¿Cómo se encuentra, qué hace, cómo sigue el proceso por el caso Colosio, qué sigue?
RME: “Antes que nada gracias por tomar la llamada y la oportunidad don Alejandro, hoy trabajando, soy un ´todólogo´ que sobrevive para poder comer, como millones de mexicanos que salen a buscar el pan de cada día, con la conciencia tranquila de no ser mala persona y menos un asesino.
Llevar ´la marca´ de esa experiencia es doloroso, aunque han pasado muchos años aún se siente con las críticas, el juicio de la gente, me ha afectado mucho en mi vida, en el negocio, yo con mi padre iniciamos un taller hace mucho, de herrería, aunque me dedico a muchas cosas en el campo, siempre de manera honesta, viajando donde el cliente lo pida”.
IN: ¿Conoció usted a Luis Donaldo Colosio Murrieta?
RME: “Nunca lo había visto, lo conocí hasta esa tarde cuando murió”.
IN. Lo implican en el homicidio de Colosio Murrieta
RME: “Así es, las autoridades nos implicaron en este lamentable hecho y fuimos presos por ello, después de comprobar que nada tuvimos qué ver y después de un año y medio, el juez dictó la libertad y nos absolvieron”.
IN: ¿Usted ha expresado que el homicidio de Colosio se trató de una acción concertada?
RME: “No, jamás lo he hecho, no sé si como se dijo fue un complot, pero nunca he dicho o afirmado que fue una acción concertada, jamás”.
IN: ¿Qué es “la marca”?
RME: “El señalamiento, que a uno injustamente lo acusen de algo que no sucedió, nunca tuvimos responsabilidad en la muerte del señor Colosio, ya el juez dictó sentencia absolutoria, después de muchos años nos siguen exhibiendo como el 2012, en una película porque unos empresarios cinematográficos extranjeros decidieron hacer dinero a costa de ese hecho.
Existen muchos medios que sólo les interesa vender, les gusta y hacen negocio con el amarillismo, eso nos ha provocado mucho daño a todos los mexicanos que exigimos justicia, no es justo que sigan difamando a la gente para vender más, en la prensa lamentablemente existe corrupción también”.
IN: ¿Qué medidas tomó en el caso de la película?
RME: “Demandamos a la empresa cinematográfica el 2012, pero no pasó nada, tiene mucho dinero y uno no puede pagar abogados”.
IN: ¿Tráfico de influencias?
RME: “Tiene mucho dinero, pueden hacer lo que quieran y no se vale, la demanda está en un juzgado en Toluca que pusimos el 2012 y a la fecha está igual como entró”.
IN: ¿Otra injusticia?
“Lamentablemente las autoridades encargadas de la justicia no hacen su trabajo, existe mucha corrupción e impunidad, por eso llamo a esas autoridades a que cumplan con la ley y no abusen de las personas, que haya justicia”.
IN: Después de todo este tiempo, el recuerdo de esa tragedia aún duele a los sonorenses, ¿qué les puede expresar a ellos?
RME: “Tengo familia en Sonora, mucha familia, yo respeto a los sonorenses, quiero decirles que tengo la conciencia tranquila, que he sufrido mucho por ese hecho, como cualquier mexicano trabajo mucho para llevar comida a mi familia, tengo tres hijas, una ya para la universidad, siempre mis respetos para todos don Alejandro”.
Caso Colosio
El 26 de octubre del 2021, a 27 años, 7 meses y 3 días del magnicidio del sonorense y entonces candidato a la Presidencia de la República, Luis Donaldo Colosio Murrieta, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos solicitó a la Fiscalía General de la República reabrir las investigaciones por actos de tortura a incomunicación contra el llamado :asesino confeso» Mario Aburto Martínez.
En la Recomendación 48VG/2021 al Fiscal General de la República (FGR) y al Comisionado del Órgano Administrativo Desconcentrado Prevención y Readaptación Social (OADPRS) por violaciones graves a los derechos humanos, a la integridad personal y trato digno, por actos de tortura e incomunicación, así como al debido proceso, la CNDH expone que “desde hace 27 años la víctima ha denunciado actos de tortura en su contra”.
La CNDH precisa que “en agravio de una persona que se encuentra en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 12 en el municipio de Ocampo, Guanajuato, donde incluso, se le prohibió establecer comunicación con este Organismo Autónomo».
El organismo indica además que “la víctima fue detenida el 23 de marzo de 1994 en Lomas Taurinas, Tijuana, Baja California, al finalizar un evento de proselitismo político en el que un candidato a la Presidencia de la República fue herido por disparos de arma de fuego, falleciendo horas más tarde”.
Expone que “en esa ocasión, la víctima fue trasladada en calidad de acusada a la Agencia del Ministerio Público Federal de la entonces Procuraduría General de la República (PGR) de esa ciudad y, el 25 de marzo de 1994, ingresó a las instalaciones del Cefereso 1 ´Altiplano´ en Almoloya de Juárez, Estado de México”.
Posteriormente, “ha sido internado en Centros Federales de Readaptación Social de diferentes entidades y desde el 21 de octubre de 2020 se encuentra en el Cefereso 12 “CPS-Guanajuato”, ubicado en el municipio de Ocampo, Guanajuato”.
Añade que “esta Comisión Nacional ha señalado en reiteradas ocasiones que la persecución y sanción de los delitos debe realizarse siempre en el marco de la ley y el respeto a los derechos humanos, enfatizando la importancia de que las conductas ilícitas de personal al servicio público también sean motivo de investigación y sanción para evitar la impunidad”.
Hace siete meses, “la CNDH recibió una nueva queja por parte del agraviado, donde señaló que desde hace 27 años ha denunciado ante esta Comisión actos de tortura reiterada y continuamente, puntualizando que, desde el 31 de agosto de 1994, existe en la FGR una investigación por esos hechos, agregando que reclama la reapertura de su caso para que se dé a conocer la verdad a toda la sociedad”.
La CNDH indica que ““en este caso, y en esta nueva etapa de la CNDH no se puede omitir la mención de su responsabilidad, toda vez que, prácticamente desde que tuvieron lugar los hechos, en abril de 1994, este Organismo Nacional tuvo posibilidad de actuar para proteger los derechos humanos de la víctima y sus familiares e incluso, garantizar una investigación y un proceso justo y apegado a Derecho, lo cual no ocurrió.
Incluso obra en los archivos de esta Comisión una entrevista de la cual no se tiene registro en ningún expediente de queja de aquellos años y realizada sin autorización del hoy agraviado, lo que cuestionaría las actuaciones de esta Comisión Nacional porque no corresponden a su función legal.
Por ello, tras investigar el caso, “la CNDH determinó que elementos de entonces la Policía Judicial Federal adscritos a la Procuraduría General de la República -hoy Fiscalía General, así como los agentes del Ministerio Público Federal que intervinieron tanto en la detención como en las primeras diligencias ministeriales y en el traslado de la víctima a las instalaciones del Cefereso número 1, incurrieron en actos de tortura en su contra y los médicos que intervinieron en los hechos actuaron de forma irregular al pretender ocultar o tolerar dichos actos”.
También se acreditó que personal médico y custodios de dicho centro de reclusión incurrieron en actos de tortura y que el Oadprs incomunicó al quejoso y lo ha mantenido en Ceferesos lejanos al lugar en donde habita su familia, lo que constituye una violación a los derechos humanos a la integridad personal y trato digno.
Puntualiza también que “las nuevas consideraciones y hallazgos, advierten violaciones graves a derechos humanos, por ello, la CNDH establece que la FGR deberá realizar una investigación del caso que dio origen a la detención y sentencia de la víctima’.
Además, estas nuevas diligencias ‘se deberán abordar sin perjuicio y con perspectiva pro homine, aportar como prueba la propia Recomendación y considerar las múltiples omisiones, ocultamientos y acciones generados en el pasado”.
Esta nueva investigación o “la reapertura de la anterior tendrá como finalidad subsanar deficiencias y llegar al pleno esclarecimiento de los hechos, que permitan a la víctima y a la sociedad mexicana acceder al derecho a la verdad de manera individual y colectiva de las reiteradas violaciones a los derechos humanos cometidas y que el Estado responda por sus actos’/
Lo anterior, no sólo a través de acciones de reconocimiento y reparación integral del daño, «sino también mediante acciones y políticas de no repetición, para que hechos de este tipo no vuelvan a suceder al margen de la protección y garantía de los derechos humanos de cualquier persona, con el fin de romper el círculo de impunidad e injusticia que por décadas ha lastimado a nuestro país”.
Por ello, “la CNDH recomendó al titular de la FGR y al comisionado de Prevención y Readaptación Social reparar integralmente el daño al agraviado y a sus familiares en los términos de la Ley General de Víctimas’.
Inscribirse en el Registro Nacional de Víctimas y otorgarles atención médica y psicológica, así como colaborar en el trámite y seguimiento de la queja que se promueva ante el Órgano Interno de Control en la FGR y en el Oadprs en contra de los servidores públicos involucrados.
Libertad de Aburto
Tras casi 30 años en prisión por el homicidio de Luis Donaldo Colosio Murrieta, Mario Aburto saldrá libre en los próximos días.
Lo anterior, luego de que el Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Segundo Circuito declarara inválida la sentencia de 45 años de prisión que Mario Aburto Martínez recibió en diciembre de 1994.
Aburto fue sentenciado con el Código Penal Federal y no con el local del estado de Baja California que establece una condena de entre 15 y 30 años de prisión.
Además, solicita que dicha resolución se cumpla en un plazo de 15 días.
Esto por el asesinato del ex candidato a la Presidencia de la República registrado la tarde del 23 de marzo en Lomas Taurinas, Tijuana.
Ahora, solicita que se emita una resolución, en la que se determine una nueva pena por el delito por el que fue imputado, pena no mayor a 30 años.
Al respecto, la CNDH consideró que ‘la resolución del juez respecto a la sentencia de Mario Aburto, es un paso más hacia la verdad y la justicia’.
Emite medidas cautelares para garantizar su integridad y reitera su compromiso hasta el cumplimiento de la recomendación 48VG/2021.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ha tomado nota de la resolución del Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Segundo Circuito, que declaró inválida la sentencia de 45 años de prisión que Mario Aburto Martínez recibió en diciembre de 1994.
Considera que ‘se trata de un paso más para lograr la verdad y la justicia en un caso que, como quedó asentado en la Recomendación 48VG/2021, está plagado de irregularidades, omisiones, encubrimientos y que, tarde o temprano, deberán ser plenamente esclarecidos’.
Ese es el sentido de la Recomendación emitida el mes de octubre de 2021, ‘cuyo seguimiento avanza por otra vía, y a lo que estamos abocados desde el día en que se publicó’.
Al confirmarse la invalidez de la sentencia de 1994 y que, al emitirla, “hubo una inadecuada defensa en su vertiente material y el juzgador natural omitió recabar diversas pruebas”.
Además de que ‘no se establecieron las razones para que, en su momento, el caso fuera analizado en el fuero federal, se confirman también, las violaciones a derechos humanos cometidas en contra, no solamente de Mario Aburto y su familia, sino de todo el pueblo mexicano’.
Conforme a lo asentado en la sentencia ‘es relevante mencionar la disposición hecha por el Tribunal Colegiado para agilizar la investigación de la denuncia por tortura presentada por Mario Aburto hace 29 años, así como su consideración sobre la posible fabricación de pruebas en contra suya, que aun cuando en este último caso reconoce que no es el tema central del nuevo estudio de la sentencia que deberá emitirse, abre la posibilidad de que, al fin, tengamos claridad sobre lo que ocurrió el 23 de marzo de 1994″.
La confesión de Aburto ‘se había obtenido bajo tortura; que innumerables veces, desde que fue detenido, él sostuvo que no era el responsable y también que había sido sometido a tortura, y que esto nunca fue valorad’.
También que ‘el proceso adoleció de vicios y fallas que derivaron en violaciones graves y entre otras más, en la violación del derecho a la verdad que merece todo el pueblo mexicano’.
Y adicional a lo anterior que, ‘aún estando enterada de todo esto la CNDH, nunca hizo nada para defender a las víctimas ni para garantizar un proceso justo y apegado al derecho’.
La CNDH seguirá trabajando por el cumplimiento total de la Recomendación 48VG/2021 y velando por la seguridad e integridad de las víctimas en ella reconocidas, ‘por lo que, en vista de la resolución del Tribunal, y las consecuencias que por esta pudieran generarse, ha solicitado ya al Director del Centro Federal de Readaptación Social No 12, en Ocampo, Gto., la emisión de Medidas Cautelares en protección de Mario Aburto Martínez, hasta en tanto no se dé el cumplimiento de dicha resolución’.
Por ello, permanecerá atento del cumplimiento del fallo emitido por el Tribunal, y ‘no cejará en su empeño en lograr que la verdad y la justicia sean restituidas a Mario Aburto y a su familia, y a todo el pueblo de México».
No son pocos los mexicanos que piensan que el atentado contra Colosio Murrieta fue una conspiración, que tradicionalmente llamamos “complot” por estar más apegada a nuestra idiosincrasia, como bien lo estableciera en su momento el líder de la Izquierda y hoy presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Después de casi 30 años de la muerte de Luis Donaldo, sigue en la conciencia colectiva la idea del crimen de Estado; sin embargo, en la de los políticos priístas se mantiene la versión del asesino solitario pues para ellos es la película que se grabaron en su memoria y ambición de poder.
Con una estrategia similar a la de una Dictadura Perfecta, la clase política de México hará hasta lo imposible para que las nuevas generaciones de mexicanos no conozcan la verdad jurídica e histórica.
