Detrás de la oposición a que Morena y sus aliados tengan mayoría calificada en la Cámara de Diputados está el rechazo a la posibilidad de que se realice la reforma al Poder Judicial, afirmó este miércoles el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien pidió que la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, informe porqué durante el proceso electoral sostuvo una reunión con el presidente del PRI y a qué acuerdos llegó con él.
“Son muy marrulleros, deshonestos, y todo, volvemos a lo mismo, por los intereses, por los privilegios, porque no quieren que los jueces estén a servicio del pueblo, quieren que los jueces, llámese magistrados o ministros, estén al servicio de una minoría, tanto de la delincuencia organizada, como de la delincuencia de cuello blanco”, expresó el mandatario en su conferencia de prensa diaria en Palacio Nacional.
El mandatario reveló que en una reunión que sostuvo el lunes con un grupo de congresistas de Estados Unidos, de los partidos demócrata y republicano, en el Palacio Nacional, los legisladores le preguntaron sobre la reforma. Señaló que les explicó que con la reforma se busca acabar con la corrupción en el Poder Judicial.
“Antier estuvieron conmigo legisladores de Estados Unidos y fue una pregunta también a partir de la manipulación: ¿qué está pasando con el Poder Judicial? Nada, es que se busca que jueces, magistrados y ministros sean electos y se les está dando la oportunidad a ellos de que participen”, comentó el tabasqueño y dijo que les puso como ejemplo de la corrupción judicial la liberación de Rafael Caro Quintero, que ocurrió un sábado, así como del hijo de José Antonio Yepez “El Marro”, el cual fue liberado también en sábado por orden de un juez.
Agregó que prefirió no comentar con los legisladores estadounidense -”porque ya era mucho”- sobre los jueces que protegen a empresas extranjeras, los que no liberan órdenes de aprehensión contra acusados de participar en crímenes de Estado, o acerca de los ministros que que guardan su un cajón de su escritorio expedientes para que los grandes empresarios y banqueros no paguen impuestos.
“Y otras cosas: el que la presidenta de la Suprema Corte va a una cena a la casa de otro ministro, una casa de lujo en las Lomas y se entrevista con el presidente de un partido, cenan y seguramente llegan a acuerdos, que por cierto, debería de informar la señora de qué hablaron, y además cómo es que aceptó ir a esa cena en pleno proceso electoral”, siguió.
“Entonces eso es lo que está de por medio. ¿Cuál violación al Estado de derecho? Si eso no es Estado de derecho, es estado de chueco, de cohecho. Lo que se busca es resolver este problema, porque si no va a ser la misma puerta giratoria, lo mismo de siempre, solo castigar al que no tiene con qué comprar su inocencia”, agregó el mandatario.
El gobierno federal presentó una proyección de cómo de la integración de la Cámara de Diputados para la LXVI Legislatura (2024-2027), en la que indicó que debe aplicarse lo que señala la ley respecto a la representación proporcional conforme a los principios contemplados en la Constitución y la ley electoral.
La secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde señaló que con la aplicación de la ley vigente, que indica que la distribución de los diputados plurinominales debe hacerse por partido y no por por coalición, la coalición Morena-PT-Verde obtendría 373 diputadas y diputados, es decir, mayoría calificada, necesaria para hacer modificaciones a la Constitución sin necesidad de los votos de la oposición.
“No quieren que se obtenga la mayoría calificada y que se tenga la posibilidad de reformar la constitución y así llevar a cabo la reforma al Poder Judicial y con ello que la gente pueda votar por jueces, magistrados y ministros. En el fondo eso es lo que está sucediendo y hoy ya no les gustó el criterio que se ha mantenido siempre y dicen que no se por partido, que se por coalición”, sostuvo.