Alejandro Matty Ortega/Irreverente Noticias
Sonoyta, Sonora (IN).- Inhumano el trato que las autoridades dan a casi 2 mil migrantes en el improvisado «Centro de Retención» en esta frontera de Lukeville-Sonoyta. La semana que entra, la CBP podría anunciar el cierre de las garitas de San Luis Río Colorado.
Hoy, el trato indigno de las autoridades, acoso de policías y de los criminales, no son los únicos peligros que enfrentan los mil 800 migrantes internacionales apostados en esta frontera de Arizona-Sonora.
La onda gélida con tempetaturas cercanas a los 0 grados se convierten en otra amenaza que atenta contra la vida de niñis, mujeres y hombres que aspiran al llamado «Sueño Americano».
Las bandas criminales acechan a los migrantes ofreciéndoles protección y abrigo en casas de seguridad, además de la promesa de cruzarlos a cambio de mil, 2 mil y hasta 5 mil dólares.
Desde el cierre de la garita el pasado lunes 4 de diciembre, unos 7 mil migrantes artibaron y han sido retenidos con fines de ser repatriados a sus lugares de origen.
Esta semana, la CBP justificó el cierre del punto fronterizo «en respuesta a los mayores niveles de encuentros con migrantes en la frontera suroeste de EU».
Lo anterior, «mpulsados por contrabandistas que venden desinformación para aprovecharse de personas vulnerables».
Precisa que «CBP está aprovechando todos los recursos disponibles para procesar a los migrantes de manera expedita y segura».
Por ello «continuará priorizando nuestra misión de seguridad fronteriza según sea necesario en respuesta a esta situación en evolución».
La Oficina de Operaciones de Campo de CBP suspendió temporalmente sus operaciones en Lukeville, Arizona, con el fin de redirigir al personal para ayudar a la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos a detener a los migrantes.
Tanto el tráfico de peatones como de vehículos en dirección norte y sur en el puerto de entrada de Lukeville se suspenderá hasta nuevo aviso.
Los viajeros pueden cruzar hacia o desde los Estados Unidos a través del Puerto de Entrada de Nogales en Nogales, Arizona o el Puerto de Entrada de San Luis en San Luis, Arizona.
Las partes interesadas y el público viajero pueden encontrar más información sobre los puertos de entrada y los tiempos de espera aquí.
“A medida que respondemos con recursos adicionales y aplicamos consecuencias por la entrada ilegal, las tendencias migratorias también cambian», precisó.
«Continuamos ajustando nuestros planes operativos para maximizar los esfuerzos de aplicación de la ley contra aquellos no ciudadanos que no utilizan vías o procesos legales como CBP y aquellos que no tienen una base legal para permanecer en los Estados Unidos».
La histórica e imparable migración internacional, provocó el cierre de la garita de Sonoyta, Sonora y Lukeville, Arizona.
La CBP concentra a su personal a la Border Patrol para realizar acciones de detección y detención de migrantes internacionales en la región Sonora-Arizona.
La autoridad migratoria estadounidense reportó más de 500 migrantes indocumentados detenidos, lo que llevó a tal decisión.
La redirección del personal reforzará la lucha de Estados Unidos por frenar la histórica migración en esta zona.
Mediante diversas redes sociales se infomó que la «CBP está aumentando todos sus recursos para el procesamiento inmigratorio».
Lo anterior, «como respuesta a un incremento de incidentes donde se han encontrado migrantes en la frontera suroeste (de EU)”.
El cierre del puesto fronterizo que entra en vigor a partir de este lunes es con “el fin de redirigir al personal para ayudar a la Patrulla Fronteriza a detener a los migrantes”.
Además, la CBP pide utilizar la garita de Nogales o San Luis Río Colorado.
Expone que «seguimos ajustando nuestros planes operativos para maximizar nuestros esfuerzos de ley y orden contra aquellos extranjeros que no utilizan vías o procesos legales”.
Al respecto, el gobernador Alfonso Durazo dijo que «cerrar una frontera no es la solución para atender un problema migratorio».
El mandatario sonorense dijo que «por eso estamos colaborando y gestionando con autoridades de Estados Unidos y nuestra Cancillería, que se resuelva el cierre de la frontera en Lukeville y Sonoyta».
Ello para «retomar nuestra histórica y exitosa relación social y comercial con Arizona».
Indicó que «nadie puede negar que el tema migratorio es de suma complejidad, pero la solución no está en el cierre de los cruces fronterizos».
Precisó que «desde el Gobierno del Estado, hemos hecho un esfuerzo extraordinario sin precedente, tanto en recursos económicos como humanos para atender con un enfoque humanitario a las personas en situación de movilidad que transitan por nuestra entidad”.
Ante el imparable flujo migratorio, esta semana podrían cerrar también las garitas de San Luis Río Colorado.